Cómo Hacer Queso Ricotta

Hacer ricotta casera es increíblemente fácil. Es mucho mejor que la comprada en tiendas porque es más fresca. Este queso es versátil y se adapta tanto a platos dulces como salados.

Esta receta produce aproximadamente 115 g de ricotta.

Ingredientes:

2 1/2 tazas de leche entera

1/2 cucharadita de sal

1 1/2 cucharadas de vinagre blanco

Preparación:

1. Forra un colador con un trozo grande de estopilla (tela para queso) ligeramente humedecida que haya sido doblada sobre sí misma al menos 3-4 veces. Coloca el colador sobre un recipiente.

2. Calienta la leche en una olla mediana a fuego medio.

3. Agrega la sal y revuelve ocasionalmente con una cuchara de madera. Asegúrate de que la leche no se queme.

4. Si tienes un termómetro, calienta hasta que la leche alcance 85 °C (185 °F). Si no tienes un termómetro, debes llegar a una etapa en la que veas mucho vapor, pequeñas burbujas cerca del borde de la olla y la formación de una ligera película en la superficie de la leche. Debería tomar alrededor de 6-10 minutos llegar a esta etapa.

5. Bájale al fuego y agrega el vinagre.

6. Revuelve lentamente la mezcla durante 2 minutos. Notarás que los cuajos (la ricotta) se separarán del suero (líquido amarillento).

7. Retira del fuego.

8. Cubre la olla y deja reposar durante unos 20 minutos.

9. Con cuidado, usando una cuchara transfiere la ricotta al colador forrado con tela para queso. La consistencia del producto final dependerá del tiempo que dejes que la ricotta se escurra. Para una ricotta cremosa, déjala reposar durante 3-5 minutos; para una ricotta más seca, puede reposar hasta 20 minutos.

10. Ajusta la consistencia y el sabor de la ricotta. Agrega un poco de suero si la quieres más cremosa y un poco de sal si te parece que le hace falta. Úsala inmediatamente. Cubre y refrigera los restos. La ricotta casera generalmente dura en el refrigerador alrededor de 5 días cuando se almacena en un recipiente hermético. Sin embargo, su frescura y calidad podrían comenzar a disminuir con el tiempo.